En la actualidad Amelia Coloma ha recogido el testigo de la elaboración de vinos. Desde niña mostró una vocación especial para el cuidado de la vid, y grandes aptitudes para la cata, orientando así sus pasos hacia el mundo del vino.
Enormemente creativa y exigente, Amelia elabora personalmente cada vino, cuidando una a una las etapas: de la vid a la mesa.
Para Amelia cada vino es, en sí mismo, una obra de arte única: el arte de pintar colores, extraer aromas y mezclar texturas con gran sensibilidad y sabiduría.